viernes, 23 de septiembre de 2016

Ganas de verle la carita a Gabriel

Hoy son 20 semanas. No me lo creo. Estamos en la mitad de todo, y ya tengo una barriguita graciosa. La verdad que la gente me dice que es poca barriga, pero bueno, todas las ecografias que me han hecho me han informado que todo va como debe y el peso del bebé está dentro de la normalidad. Espero que el martes que tengo eco, todo siga bien y esté todo correcto. 
Aún no lo siento... eso me tiene un poco mosqueada, porque hay gente que ya con 20 semanas lo ha notado y yo no... pero bueno, imagino que dependerá de cada embarazo y de cada mujer. 
Lo que sí estoy haciendo es mantenerme en forma, dentro de lo que cabe. Voy a natación para embarazadas y he notado mucha mejoría en la espalda, y además, me he apuntado a yoga con mi cuñada. Son estiramientos y ejercicios muy buenos para mi, y la profesora transmite una paz y serenidad que se agradecen en estos días, en los que a veces el miedo vuelve a mi mente y ciertos temores se apoderan de mi. Ayer mismo, mientras estaba en yoga relajándome casi al final, con los ojos cerrados, me preguntaba cómo será su carita, cómo serán sus ojos o su pelo, ¿tendrá el pelo rizado o liso? Mi pequeño Gabriel, estoy deseando verte para quererte hasta el fin de mis días.
Esta semana vi a mi amiga R, una persona que solo hacen falta 5 minutos hablando con ella para incluirla en tu lista de amigas "positivas", alegres y que te hacen desear vivir con ilusión cada día. Es tan especial, que la quiero desde hace años, muchos ya... Ella me va a regalar un bolsito para el hospital y el cojín de lactancia. Especial no, lo siguiente. Deseo toda la suerte del mundo y que se cumplan todos sus deseos.
Ayer nos fuimos mi marido y yo por la Alhambra, ese palacio tan especial que tenemos a tiro de piedra los granadinos, y estuvimos haciendo fotos para un concurso, aunque mi marido no perdió la oportunidad para hacerme fotos a mi, con mi pequeña barriga. Tengo una foto, con el Partal de fondo, que es muy bonita, y en ese instante me paré y pensé que esa escena la había soñado cientos de veces, verme allí con él haciéndonos fotos, y por fin, se estaba haciendo realidad. Sí, los sueños a veces se cumplen, aunque no en el instante o momento que deseamos, pero sí, es real. 
Qué especial me hace sentir verme con la barriga así, redondita. No os imagináis el grado tan grande de satisfacción e ilusión que he alcanzado. El clímax será cuando le vea la carita a mi ángel Gabriel. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario